Para esta gran oportunidad, Carlos Vivier, el habitual seleccionador de los miembros del equipo, ha escogido a Alexandrina Cabral como lateral, que se ha reincorporado hace poco tras su maternidad, y a Marta López como extremo. Según el, lo importante es elaborar un equipo equilibrado que tenga la experiencia suficiente como para afrontar lo que supone el hecho de presentarse a un Mundial del deporte.
Vivier también ha seleccionado a Silvia Navarro, Darly Zoqbi y Mercedes Castellanos como porteras, y a Nerea Pena como central, que estuvo ausente en la eliminatoria de clasificación del Europeo del 2020 contra Austria por una fractura en la mano. La constancia, perseverancia, y esfuerzo del balonmano femenino ha conseguido que lleguen hasta aquí.
La selección femenina ya ha anunciado que iniciará su fase de preparación día 18 en Madrid, y su viaje hacia Japón será el día 22 del mismo mes. En el grupo C de la primera fase se deberán enfrentar a Rumanía, Hungría, Senegal, Kazajistán y Montenegro.
El técnico del equipo afirmó que “Todos nos jugamos mucho, vamos con mucho respeto, pero sin miedo. Cuando el equipo sabe solventar los problemas físicos o las ausencias por lesión, se agarra a la pista ante cualquier rival”. Costará mucho frenar a nuestro equipo nacional, que lo dará todo por representarnos en el Mundial.